Las mejores firmas madridistas del planeta
Inicio
Opinión
Lesiones que no truncaron una carrera

Lesiones que no truncaron una carrera

Escrito por: Alberto Cosín24 enero, 2021
VALORA ESTE ARTÍCULO
1 estrella2 estrellas3 estrellas4 estrellas5 estrellas

A lo largo de la historia del Real Madrid hay bastantes casos de jugadores a los que una lesión puso en peligro su carrera o su trayectoria en el club blanco. Sin embargo, y pese a la gravedad de sus fracturas, con sacrificio, esfuerzo y tesón consiguieron la recuperación completa y triunfar o seguir rindiendo a un nivel muy alto al regresar al césped.

Bernabéu jugador

Santiago Bernabéu llegó al Madrid F.C. y a pesar de que había sido portero anteriormente, su hermano Marcelo le prohibió ponerse bajo palos y lo situó en la punta de ataque. Era 1912 y durante cinco temporadas fue un artillero magnífico y eficaz tanto en el Campeonato Regional como en la Copa. Sin embargo, el cuadro blanco no levantaría este título hasta 1917 y Santiago Bernabéu se perdió la final. Fue la gran espina clavada de su vida deportiva. La razón: una lesión muy grave unas semanas antes en la Copa Foronda ante el F.C. Barcelona. Este torneo de carácter amistoso se disputó el 21 de abril de 1917 y los blancos se impusieron por 3-1. Bernabéu marcó dos dianas pero no terminó el partido debido a un fuerte rodillazo del culé Llobet, que le produjo una hernia estrangulada. El almanseño estuvo en cama durante más de un mes y se llegó a temer por su vida hasta que fue operado en el mes de junio. Todos los gastos de la intervención quirúrgica fueron sufragados por el delantero, que estuvo medio año ausente de los terrenos de juego y no pisó un campo de fútbol hasta febrero del año siguiente. A su vuelta continuó con una media goleadora extraordinaria, que en algunas campañas como la 1918-1919 o la 1921-1922 superó el gol por encuentro. Además, sumó a su palmarés otros siete Campeonatos Regionales, aunque de nuevo la Copa se resistió en 1918 al igual que le había ocurrido en 1916.

Zamora lesionado

En 1930, el equipo madridista realizó la primera incorporación galáctica de su historia: Ricardo Zamora. El arquero fichado del RCD Español por 150.000 pesetas debutó oficialmente frente al Racing de Madrid en el Campeonato Regional en octubre de 1930. Sin embargo, apenas unos días después sufrió la lesión más importante de su carrera. En un partido de la misma competición ante el Athletic de Madrid una salida valiente a los pies del atacante Buiría le supuso una fractura longitudinal múltiple de la escápula izquierda (omóplato y clavícula) y luxación del hombro. Zamora queda conmocionado con muchos dolores en el hombro y debe ser sustituido por Vidal. La lesión es gravísima y el guardameta tiene 30 años. Sin embargo, la operación del doctor Antonio Oller es satisfactoria y Ricardo Zamora se va recuperando poco a poco hasta que reaparece en un amistoso en Huelva en enero de 1931. El ‘Divino’ estuvo muy preocupado durante su convalecencia y llegó a escribir el inicio de sus memorias previendo la conclusión de su etapa futbolística. En el siguiente lustro se hace leyenda de la entidad y suma dos títulos de Liga, dos de Copa y una parada para la historia del fútbol a Escolá.

Chus Alonso fue uno de los futbolistas escogidos por el equipo capitalino para iniciar su reconstrucción tras la Guerra Civil. El interior, nacido en Cuba pero de origen asturiano, fichó por el Madrid procedente del Oviedo. Sus primeras temporadas fueron notables y demostró su alianza con el gol superando la decena de dianas por campaña. Sin embargo, unos delicados problemas de salud desde 1945 le impidieron disputar partidos oficiales durante dos años. No fue hasta abril de 1947, en la última jornada de la Liga, cuando regresó para vestirse la casaca blanca. Unas semanas después, en la Copa que revalidaría el Real Madrid, disputó cuatro encuentros y marcó ante el Ferrol. En la siguiente temporada, la última en el club, volvió a rendir a un nivel mayúsculo y sus seis goles ligueros fueron importantes para evitar el descenso a Segunda. Además, también anotó en el triunfo de la Copa Eva Duarte contra el Valencia y consiguió el primer gol en partido oficial del nuevo Chamartín ante el Athletic.

Rial

Héctor Rial fue una petición de Alfredo Di Stéfano a Bernabéu, que satisfizo sus deseos en 1954. El argentino pronto destacó como uno de los mejores jugadores del fútbol español y fue clave en la consecución de la I Copa de Europa merengue. Pero en 1957, en un partido liguero de la jornada dos contra el RCD Español, el hispano-argentino, en un choque con Ruiz, sufrió una rotura total de la inserción del ligamento lateral de la rodilla derecha. El parte médico a finales de septiembre hablaba de varios meses de baja y el jugador, junto al galeno del equipo, Pruden, se fue a Barcelona para ver a los especialistas en rodillas, el Dr. Cabot y el Dr. Naves. Finalmente se decidió operar y se escayoló al futbolista, que pasó gran parte de su recuperación en la Ciudad Condal y realizando entrenamientos en solitario en Les Corts. En abril de 1957 retornó al césped y su papel resultó fundamental en las semifinales de la Copa de Europa ante el Manchester United, al que marcó en la ida y en la vuelta. En la siguiente temporada se vio a un Rial sin secuelas y a un nivel muy alto. Actuó en 39 partidos a lo largo del curso y anotó 22 tantos.

Amancio lesión

En 1965 Amancio Amaro ya era uno de los grandes baluartes del equipo blanco tras la marcha de Di Stéfano el año anterior. El gallego formaba una delantera de lujo con Pirri, Grosso, Puskas y Gento. Era su tercera temporada y todo marchaba bien hasta el clásico frente al Barcelona en el Camp Nou el último día del mes de febrero. Una entrada de Torrent le dejó cojeando en un partido que se llevó el Real Madrid por 1-2 y la consecuencia negativa fue que no volvería a jugar el resto de la campaña. Una luxación de los tendones peroneos del tobillo derecho le obligó a ser operado y a acumular siete meses de baja. Volvió en octubre de la temporada 1965-1966, el año de la Sexta Copa de Europa, donde el coruñés consiguió cinco goles, uno incluido en la final ante el Partizan de Belgrado.

Benito lesión

El dúo Benito-Pirri fue una pareja grandiosa de centrales del Real Madrid desde mediados de los años 70. Los dos tenían en común ser jugadores duros, raciales y valientes, que se jugaban el tipo en cualquier jugada y circunstancia. De este modo, los dos acumularon un historial muy largo de lesiones graves y duraderas que no les impidieron triunfar cada vez que volvían a calzarse los borceguíes. En el bagaje de Benito figuran ocho operaciones: cinco en la rodilla, una en la tibia y dos por fracturas en la nariz. Además, tuvo fracturas en las costillas y en los dedos del pie. Mientras que Pirri fue un habitual en la sala de operaciones para el doctor de la entidad blanca López Quiles. Una fractura de clavícula en una final de Copa ante el Barcelona, una rotura del brazo en la final de la Recopa contra el Chelsea, una fractura del maleolo tibial derecho en una visita liguera a La Rosaleda, o una rotura en un dedo del pie tras un pisotón en un derbi madrileño son las lesiones más importantes que soportó el ceutí.

Santillana lesión

La carrera de Carlos Alonso ‘Santillana’ estuvo a punto de dar un giro dramático en 1973. El cántabro aterrizó en la capital 20 meses antes y pronto demostró sus cualidades para el gol y el remate de cabeza. En abril de 1973 el Real Madrid jugó en Sarriá en Liga y cayó por la mínima. Además, estuvo cerca de perder también la presencia de Santillana en la plantilla. En un ataque blanco, el excentral madridista De Felipe le dio un rodillazo a la altura del bajo vientre que le hizo al santanderino dar una voltereta y caer de espaldas. Los jugadores pronto se dieron cuenta de la gravedad del golpe al no poderse mover el delantero del dolor. Tuvo que ser cambiado por Anzarda y ya en la ducha orinó sangre. Sin embargo, no se tomó la decisión de ir al hospital y durmió en el hotel. Tras un par de semanas de baja se le hicieron pruebas el 8 de mayo y se descubrió que solo tenía un riñón, el derecho, y más grande de lo normal. Algunos médicos le descartaron para seguir en activo y otros que sí lo veían posible. Finalmente, una visita a Barcelona al doctor Puivert, una eminencia en urología, le dio el OK para continuar su carrera. Un nuevo accidente, más fuerte, era remoto. Pese a ello, Santillana jugó con miedo durante los siguientes meses y tardó en recuperar la confianza. Tenía 20 años, pero completó tres lustros más de vida deportiva logrando ocho Ligas, cuatro Copas o dos Copas de la UEFA y siendo a su retirada el segundo mejor artillero de la historia merengue.

Camacho lesión

José Antonio Camacho fue un jugador distinto antes y después de su lesión en 1978. Pero se supo reinventar para ser un icono del equipo madridista y un jugador admirado y querido a partes iguales. El de Cieza llegó al Real Madrid en 1973 y como lateral izquierdo desplegó un arsenal de recursos ofensivos subiendo la banda. Sin embargo, una lesión en un entrenamiento el 5 de enero de 1978 cambió su carrera. Una lesión gravísima, indicó el doctor López Quiles, que le operó una semana después: rotura de ligamento interior cruzado y desprendimiento de menisco en la rodilla izquierda. Se hablaba de una baja de cuatro meses y Camacho quería ir al Mundial de Argentina. Todo se complicó y finalmente fueron 20 meses (con el curso 1978-1979 en blanco) en el dique seco. Según el lateral, la operación no fue lo exitosa que dijo el doctor y un año después viajó a París para que le interviniera el doctor Judet y retirarle unas adherencias que no le permitían flexionar con claridad la rodilla. Aquello fue el principio del fin para López Quiles como galeno merengue. Camacho regresó en un partido oficial el 9 de septiembre de 1979 pero se vio un futbolista distinto. Se hizo más conservador y un jugador más defensivo. Un jugador muy eficaz en la marca y en el pase pero menos vistoso. Con todo ello, tuvo una década de los 80 espectacular, con títulos que engrosaron su palmarés y a su retirada entró a formar parte de las leyendas de la entidad.

Gordillo lesión

En 1985 Ramón Mendoza tuvo un mercado de fichajes fantástico que aún se recuerda: Maceda, Hugo Sánchez y Gordillo. El zurdo de Almendralejo llegó del Real Betis para adueñarse del carril izquierdo de la ‘Quinta del Buitre’. Para ello tuvo que sobreponerse a dos lesiones similares en apenas medio año. El 15 de diciembre de 1985, en una entrada de Mino en un Sporting-Real Madrid, sufrió una fractura benigna de peroné en su pierna izquierda sin desplazamiento del hueso, aunque sí estaba roto. Se le colocó una férula y estuvo apartado de los terrenos de juego casi tres meses. Cuando regresó en marzo rayó a gran nivel y su participación fue básica para ganar la Liga y la Copa de la UEFA. Ese verano, Muñoz le convocó para el Mundial de México. En tierras aztecas, sin embargo, solo pudo jugar un partido ante Irlanda del Norte porque se volvió a fracturar el peroné izquierdo. En las pruebas en México no se le detectó la lesión y no fue hasta su vuelta a Madrid, con unas nuevas radiografías, cuando se vio que el nuevo golpe le abrió el callo de la anterior rotura. Este percance le obligó a perderse casi toda la pretemporada y el primer partido de Liga. Gordillo volvió ante la UD Las Palmas y en los siguientes cuatro cursos pudo levantar cuatro Ligas y una Copa, marcando él ante el Real Valladolid el tanto del triunfo.

Redondo lesión

Fernando Redondo fue unas de las grandes irrupciones en la Liga española a principios de los 90. Su impresionante papel en el Tenerife llamó la atención de los grandes, pero el Real Madrid se adelantó al resto y lo trajo junto a su entrenador Valdano en el verano de 1994. La expectación era enorme por verle jugar, pero en la pretemporada ya se produjo una mala noticia. En un encuentro contra el Athletic del Trofeo Euskadi, una entrada de Mendiguren le causó una rotura parcial del ligamento interno de la rodilla izquierda. Dos meses de baja y se perdería el inicio de la campaña. Pudo estrenarse de forma oficial contra el Compostela en la jornada 8 y hacerse con un hueco en el once, pero en la jornada 14 otra lesión. En un Real Madrid-Oviedo fue Jokanovic el que le originó, en una entrada muy dura, una rotura parcial del ligamento lateral interno de la rodilla derecha. Dos meses y medio de baja y entre otros duelos se perdió el mítico 5-0 al Barcelona de regalo de Reyes de los jugadores a su afición. Redondo se recompuso y alzó el título de Liga número 26 de la entidad esa temporada. En la siguiente, una entrada de Josico del Albacete le rompió el ligamento externo del tobillo izquierdo y le dejó fuera del césped desde marzo hasta final de curso en un año muy difícil en la entidad. A partir de 1996 las lesiones le respetaron mucho más y en las cuatro campañas posteriores ganó otra Liga, dos Champions, una Copa Intercontinental, la admiración del fútbol europeo y el corazón de todos los madridistas.

Karanka

Los inicios de Aitor Karanka en el Real Madrid fueron complicados. El vitoriano fichó procedente del Athletic para la 1997-1998 y estaba siendo utilizado por Heynckes, pero a mediados del curso sufrió en un entrenamiento un dolor en el pecho y tuvo que ser ingresado en una clínica. Tras unas exhaustivas pruebas médicas se le detectó una leve dolencia en el corazón, una miopericarditis aguda idiopática benigna. Los primeros datos le confirmaron que estaría fuera del equipo el resto de la campaña, pero finalmente todo se alargó y no volvió a jugar hasta un año después, en febrero de 1999. El central reapareció de forma oficial contra el Racing en Copa y en los dos siguientes años vivió su mejor etapa merengue. En la temporada 1999-2000 acabó siendo un indiscutible en la zaga campeona de la Champions junto a Helguera e Iván Campo y en la 1999-2000 formó un gran dúo defensivo junto a Hierro en el cuadro blanco que alcanzó la Liga número 28.

Pepe lesión

En la época de Pedja Mijatovic como Director Deportivo, llegaron con apenas seis meses de diferencia Gonzalo Higuaín y Pepe. El argentino lo hizo en el mercado de enero de 2006 y el portugués en verano, tras un desembolso de 30 millones de euros. Los dos triunfaron en la casa blanca, aunque para ello debieron superar dos lesiones de consideración.

En orden cronológico, el primero en sufrirla fue el central en diciembre de 2009. En un partido ante el Valencia, en un salto con Villa, el zaguero cayó mal y como resultado sufrió una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha. Con lágrimas en los ojos Pepe se retiró del campo sabiendo la gravedad de la lesión que le tendría fuera del campo el resto de la temporada tras ser operado. Peligraba también el Mundial, aunque finalmente, en un esfuerzo en su recuperación, logró llegar para disputar 135 minutos. A su regreso a Madrid completó sin problemas la pretemporada y continuó siendo un baluarte defensivo del equipo como había sido hasta la fecha. Siete temporadas más siguió en la disciplina blanca, tiempo en el que pudo conquistar dos Ligas más, tres Champions y dos Copas, entre otros títulos.

Higuaín

Por su parte, el peor momento para Higuaín llegó durante el curso 2010-2011. Una hernia discal en la zona lumbar (L5-S1) le produjo una debilidad sensitiva y motora en la extremidad inferior y le obligó a ser operado. En un primer momento tuvo un tratamiento conservador, pero un golpe en un partido contra el Athletic el 20 de noviembre de 2010 agravó la lesión. Finalmente, en enero del nuevo año entró en quirófano para ser operado por el doctor Fessler en Chicago. Se estimaba que se perdería el resto del curso, pero volvió a los cuatro meses para jugar contra el Sporting en el Santiago Bernabéu. La siguiente campaña de 2011-2012 fue una de las más completas que tuvo en el club. Su complexión y su cuerpo cambiaron, pero su rendimiento fue altísimo y acabó con 26 dianas en 54 encuentros. 22 de esos goles (4º goleador del Campeonato) fueron en la Liga de los récords con Mourinho como técnico, en un año donde el argentino se alternó de forma eficiente con Benzema en la punta del ataque. Su trayectoria en el cuadro blanco finalizó una temporada más tarde, en la que acumuló otros 18 tantos en su bagaje anotador.

Varane lesión

El último jugador de esta lista de futbolistas que se recuperaron con éxito de una lesión grave y siguieron haciendo historia en la entidad madridista es Raphael Varane. El francés llegó como un joven prometedor en 2011 y ha cumplido lo que se esperaba de él. Sin embargo, no ha tenido un camino sencillo para lograrlo debido a una lesión de menisco. El 11 de mayo de 2013, un choque en Cornellá-El Prat con Wakaso del RCD Espanyol le generó una rotura del menisco interno de la derecha. La baja se estimó entre seis y ocho semanas y a la pretemporada en Miami se incorporó sin problemas. Sin embargo, con la carga de trabajo se le inflamaba la rodilla. Así estuvo muchos meses y apenas podía disputar dos o tres encuentros seguidos sin que se le hinchase la zona y tuviera líquido sinovial en la articulación. Por suerte, los tratamientos conservadores funcionaron y la rodilla dejó de darle problemas y le permitió jugar con asiduidad en el último lustro. En ese tiempo se ha convertido en uno de los mejores centrales del planeta y, además de ser campeón del mundo con su selección, ha podido conseguir un palmarés excepcional en el cuadro blanco con cuatro Champions, dos Ligas y cuatro Mundiales de Clubes.

 

Fotografías: Getty Images

Foto del avatar
Apasionado del balompié, me hubiese gustado ver en directo a las figuras de los años 30, 40 y 50. Gato y madridista, en mi primera visita al Santiago Bernabéu pude contemplar a Diego Armando Maradona.

4 comentarios en: Lesiones que no truncaron una carrera

  1. Me ha parecido muy interesante, sobre todo lo de Don Santiago.
    Yo incluiría a Gareth,recuperado varias veces desde 2013 de lesiones muy graves.
    Esperemos que Hazard y Asensio también sean capaces.

    Me ha parecido un poco raro el timing del artículo.
    No sé si tiene que ver con Odegaard o no.

  2. Me ha gustado mucho, da gusto leer sus bien documentados artículos. Ahora tenemos a Asensio, y tengo esperanzas de que vuelva a su anterior nivel o incluso lo mejore. Que nos hace mucha falta...

Responder a Alberto Cosín Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

homelistpencilcommentstwitterangle-rightspotify linkedin facebook pinterest youtube rss twitter instagram facebook-blank rss-blank linkedin-blank pinterest youtube twitter instagram