Rubalcaba: "Parece que hay que disculparse por la Undécima"

Que uno de los pesos pesados más rotundos de la política española de los últimos treinta años necesite recurrir a un "banquillo sentimental" para elaborar su once histórico de jugadores del Madrid demuestra que los políticos, después de todo, tienen su corazoncito. Alfredo Pérez Rubalcaba: un hombre asombrado ante la nula mella que el transcurrir del tiempo hace en su forofismo madridista.

P: Vamos con el once.

R: He puesto en el once a los que considero más convenientes, y luego he hecho un banquillo con mis predilecciones personales, un banquillo sentimental. Quiero decir que me gustaría que Santillana hubiera sido mejor que Di Stéfano, pero no lo es.

P: Perfecto. Adelante.

R: No tiene nada de original. En la portería, Casillas. De lateral derecho voy a poner a Sergio Ramos. No es su puesto favorito, pero eso me permite poner aquí (en el puesto de central) a Hierro, y junto a Hierro pongo a Redondo, también para abrir hueco a otros (ya veréis quiénes) en el centro del campo. Roberto Carlos de lateral izquierdo.

P: En este último coincide con todos nuestros entrevistados. Vamos con ese mediocampo entonces.

R: Pues aquí tienes que poner a Pirri. A Zidane, claro está. A la derecha pongo a Míchel. ¿Es el mejor 8? Pues no, pero es el mío. Aquí pones a Raúl, a quien por trayectoria no puedes dejar de alinear; aquí a Di Stéfano; y aquí naturalmente a Cristiano.

P: Un 4-3-3.

R: Correcto. Aunque, bueno, a Redondo obviamente lo puedes poner en el centro de la cancha. Y ahora voy a poner ese banquillo sentimental que os contaba. Los que me habría gustado poner de titulares pero no puedo. El primero es Santillana. Fue mi delantero centro preferido. Lo tenía todo: valiente, de Santander y con un solo riñón. (Risas). El segundo es Gento, que está aquí por dos cosas: correr mucho (como yo, que como sabéis fui atleta) y ser también cántabro como Santillana y como yo. El tercero es Juanito. El siguiente es Velázquez, que era un genio, pero cómo ponerlo de titular cuando para jugar de 10 tengo a Zidane. Y en el banquillo pongo asimismo a Laudrup, que es como Velázquez pero en danés. De portero suplente pongo a García Remón, y añado al banquillo las incorporaciones sentimentales de Sanchís -tengo pocos defensas- y Butragueño. ¿Qué os parece?

P: ¿Y de entrenador?

R: (Duda). ¿Miguel Muñoz? Podría ser, pero por la cosa sentimental creo que me inclino por Del Bosque.

P: ¿Y de capitán?

R: Di Stéfano, claro. Le vi poco por cuestión de edad, pero cómo no otorgarle el brazalete. Creo que me queda un once apañado. Pero siempre te dejas gente fuera. Imagínate. Mijatovic, por ejemplo. Stielike. Seedorf. Netzer. O Hugo Sánchez, que era un gran rematador.

P: No le caía ni le cae bien a casi nadie, parece. Nunca entendí por qué.

R: A mí me cae muy bien. Y siempre defiende al Madrid. En la final de Milán dijo abiertamente que iba con el Madrid, cuando podía haber dicho lo contrario porque él, por supuesto, jugó también en el Atleti. Pero esto del once es bien difícil porque... ¿y Gordillo?

P: Le acusaban de tener una sola jugada, irse por la banda y centrar.

R: Ya pero cuando un futbolista es tan predecible y sin embargo le sale bien 9 de cada 10 veces, sólo puede ser por ser muy bueno.

P: Usted es muy forofo.

R: Mucho.

P: ¿Usted comprende a los que dicen que son del Madrid pero no pierden el sueño por ello? ¿Cómo se puede ser "un poco" del Madrid?

R: Es gente que se equivoca. Con los años, mi forofismo ha ido a más en lugar de ir a menos. A veces lo comento con otro gran madridista amigo, Jaime Lissavetzky. "Alfredo", me dice, "creo que deberíamos moderarnos un poquito". He intentado analizar por qué soy madridista y de dónde viene tanta pasión. Me hice del Madrid con seis o siete años. ¿Por qué? No lo sé. ¿Mi padre era madridista? Sí, pero con mesura. ¿Y por qué luego me hice tan madridista? ¿Por qué cada día lo soy más, cuando todas las pasiones tienden a decrecer con el paso del tiempo? No es de recibo tanta pasión por algo a esta edad. Morir de un infarto a mis años por un partido de fútbol no es digno. Y si te mueres a la hora del partido delante de la tele, es imposible negar las causas de la muerte, que pasarán a la posteridad.

P: Ha hablado de la final de Milán, a la que sin embargo, e increíblemente, vemos que sobrevivió. ¿Cómo lo sobrevivió y, sobre todo, cómo lo vivió?

R: Como todos los madridistas, supongo. Viví 25 minutos iniciales de tranquilidad por el buen juego con un resto del primer tiempo francamente mosqueado. El segundo tiempo lo pasé con gran nerviosismo. La prórroga, histérico. Y los penaltis, de pie.

P: Y éxtasis final.

R: Éxtasis terrible al final, sí.

P: ¿Más nervios que en Lisboa?

R: Sí. Porque yo en Lisboa, la verdad, lo vi perdido. Y como lo vi perdido lo viví como una alegría inesperada. Pero es que en Milán podíamos ganar, y lo veías. De hecho el Madrid jugó mejor que el Atleti en la prórroga. Esto nadie lo ha escrito, pero es así. Sin embargo, una vez en los penaltis, es una lotería. Sí, sabes que Keylor para en general más penaltis que Oblak, pero olvídate: sigue siendo una cosa sobre la que influye mucho la suerte. Y por eso me pongo tan nervioso con los lanzamientos. Pero esta vez aguanté, los vi todos, lo cual me pone muy orgulloso. De pie, pero aguanté. Me gustó la tesis que le oí a Zubizarreta en la retransmisión. Juanfran aguantó mucho a Keylor, y cuando por fin lanzó tuvo que ajustar mucho al palo porque vio que Keylor había intuido por dónde iba. Tanto ajustó al palo que fue al palo. Lo sé porque lo he visto diez o quince veces. (Risas algo tímidas).

P: Hay una ola de revisionismo sobre este partido, a pesar de que acabamos de verlo todos. ¿El Madrid mereció ganar?

R: Sí, claro. Parece que el madridismo haya encajado este título con algún complejo. Dado además que el Atleti tiene esta épica de perderlo todo en el último minuto, parece que la historia se ha escrito de forma distinta a como yo la vi. Es como si el Madrid no hubiera merecido ganar. Parece que se dice "sí, el Madrid ganó pero quien puso el sacrifico y el mérito fue el Atleti" y tal. No, oiga. El Atleti mereció perder. Mereció perder porque tuvo dos ocasiones y el Madrid cinco. Es verdad que en el segundo tiempo dominó, pero solo creó dos oportunidades: el gol y el penalti que falla Griezmann, que entre tú y yo es un penalti dudoso.

P: ¿Eso piensa? No mucha gente lo dice. Yo solo se lo he oído decir a Eduardo Inda y, ahora mismo, a usted.

R: Si no lo pita, no pasa nada. Pepe fue al balón claramente y se encontró con que Torres lo protegió. Pero bueno, no pasa nada, damos por bueno el penalti, que en todo caso el Atleti no aprovechó. Y no hay más ocasiones rojiblancas salvo el gol de Carrasco.

P: No hace falta que le hable, ya que saca el factor arbitral, de cuánto se insiste en el fuera de juego de Ramos en el gol nuestro.

R: Es fuera de juego, pero son polémicas de las que hay varias en cada jornada de liga, dado que son offsides muy difíciles de delimitar. Es un balón que va a la olla y encima hay un jugador que toca de cabeza antes. Es muy difícil de ver, pero el hecho es que ya tienes construida la leyenda negra: "El gol no era, el Atleti dominó y al final caemos en los penaltis, que son pura suerte". Yo entiendo un poco este victimismo porque lo cierto es que el Atleti tiene mala suerte, pero ya está bien. Parece que tenemos que pedir perdón por la Undécima, y no. El madridismo ha dejado que se construya una leyenda según la cual se cometió una injusticia con el Atleti en la final, y no deberíamos consentirlo. El victimismo del Atleti tiene su punto de verdad: aquella final contra el Bayern con un gol de un defensa en el minuto 88, el gol de Ramos en Lisboa y ahora esto. Pero ya está bien con esta especie de mala conciencia que algunos madridistas parecen tener por lo de Milán. Hemos dejado colar la especie de que no solo perdieron en los penaltis sino que además perdieron injustamente. Eso se ha colado por ahí.

"Me alegra mucho que el Real Madrid no se alinee políticamente con nadie"

P: ¿Usted no cree que eso de dejar que sean nuestros rivales quienes construyan nuestro relato es ya un clásico del madridismo?

R: Pues sí, como esos que recogen firmas para que nos quiten las primeras copas de Europa por ser "franquistas". Militando como milito en una organización de izquierdas, imagina las polémicas que yo he tenido con eso. Los directivos de los equipos de fútbol del franquismo eran todos franquistas. Por desgracia, tenían que cumplir con cuotas de fidelidad al régimen y las cumplían, pero todos, no solo los del Madrid. Así que estos movimientos de los que hablas son ridículos, aparte de que conducen a la politización del fútbol. Yo estoy dispuesto a admitir la trascendencia política que tiene el Barça en Cataluña, sin que nuestro club represente nada parecido en Madrid. Pero el Barça debería darse cuenta de que tiene aficionados en toda España y en todo el mundo.

P: Xavier Sardá abjuró de su barcelonismo cuando vio que los cuatro candidatos a la presidencia del Barça, en las últimas elecciones, apostaban por el soberanismo.

R: No conozco a esos candidatos, pero (aun siendo esto una presunción) creo que aquello era una estrategia más que una muestra de convicción personal de los candidatos. Dicho esto, se trata de una cuestión que posiciona al Barça de un modo que desagrada a muchos seguidores del Barça fuera de Cataluña y hasta en la propia Cataluña, como es el caso de Sardá. Yo me alegro mucho de que mi club no se alinee políticamente. No tengo ningún trauma con ser de izquierdas y del Madrid. Es profundamente compatible.

P: Estadísticamente, no obstante, ¿tiene usted la sensación de que la gente del Madrid es predominantemente de derechas?

R: Sí, es probable. Y sobre todo, lo dicen más. Es posible que el palco del Madrid sea mayoritariamente de derechas, sobre todo cuando aparece por allí cierta persona de la que prefiero no acordarme. (Risas).

P: Pablo Iglesias se posicionó a favor del Atleti en los prolegómenos de la final de Milán, aduciendo razones "casi políticas". ¿Qué le pareció?

R: Eso es muy de Pablo Iglesias. Suele decir lo que él interpreta que la gente quiere oír. Él piensa que hay más gente de izquierdas que es del Atleti y por eso dice que es del Atleti, pero diría que es del Madrid si pensara que los de izquierdas son del Madrid. Es como Aznar, quien, al igual que Rajoy, tardó en revelar su madridismo.

P: Ah, ¿sí?

R: Claro. A Aznar le recuerdo en la puerta del Bernabéu definiéndose como hincha de la Selección Española. Yo le respondí en algún medio que confesara, que la gente no iba a quererle más o menos por ser del Madrid. Fue cosa de su asesor de imagen: "Cuidado, no te definas como madridista porque hay gente que no lo es". A Rajoy también le ha costado mucho dar a conocer que es socio del Madrid. ¿Por qué se escondía? Menuda bobada. La gente entiende que los políticos seamos de un equipo o de otro.

P: ¿Qué ha sentido usted cuando ha escuchado rumores de Aznar como candidato a la presidencia del Madrid?

R: Me he echado a temblar. (Risas).

P: ¿Es verdad que Florentino le ofreció una vez una vicepresidencia del Club?

R: Es falso. Nunca me ha ofrecido nada, aunque es amigo mío. Esa es otra cosa que sería absurdo ocultar. Soy amigo de Florentino, que además es el presidente de mi club de fútbol.

P: Además de ser amigo suyo, ¿es usted florentinista? Porque quizá no sean cosas que vayan necesariamente de la mano.

R: Pero sí lo soy. A veces me cabreo con cosas, claro. ¿Habría yo echado a Ancelotti? Pues no lo sé. Desde luego no para fichar a Benítez. ¿Lo de nombrar entrenador a Zidane? Reconozco que me pareció arriesgado. Ha salido bien, pero tenía muy poca experiencia. Ha tenido mano izquierda para gestionar esos egos, y esa ha sido su gran virtud. Ha sabido llevar a los jugadores. Su trabajo ha sido más psicológico que futbolístico. Ha logrado pasar de un vestuario enrabietado a uno ilusionado, y esto es muy importante, cuidado.

"Es falso que Florentino me ofreciera una vicepresidencia"

P: No cabe duda de que Modric es un jugador esencial en este equipo. ¿Qué le parece el croata?

R: Fantástico. Es al Madrid actual lo que Velázquez era al Madrid de mi época. Me recuerda a él. Inteligente, limpio y con una visión de juego increíble. Modric tiene menos recorrido, pero tiene ese aura de jugador de culto también. Espectacular. Ha mejorado mucho desde que llegó y ahora es imprescindible.

P: A Modric lo trajo Mourinho. ¿Qué opina de él?

R: No es mal entrenador. Pero creo que su forma de ser es incompatible con el madridismo. Cuando le metió el dedo en el ojo a Vilanova, pensé que habíamos fichado a un chulo de billares en lugar de un entrenador. A medida que le fueron yendo mal las cosas, además, acentuó esa parte bronca de su carácter. Es como esos políticos que se dirigen a la parte más extremista de su electorado.

P: ¿Y su herencia deportiva?

R: Su historial deportivo es estupendo. Pero exacerbó sus peores características en el Madrid. Lo de que afeara a Casillas el llamar a Xavi para hacer las paces es algo que no puede ser. Tenías que entender que son compañeros de Selección. Y esto de dividir el vestuario, en plan "conmigo o contra mí"... Decididamente, y sin ser un mal entrenador, no me gustó. No calculó la cuota de pantalla que tiene el Madrid.

"Mou es como esos políticos que se dirigen a la parte más extremista del electorado"

P: Mou gustó a muchos porque intuyeron que suponía un nuevo relato para el Madrid, algo de lo que hablábamos antes. ¿No nos construye el relato el enemigo? ¿No era Mou una reacción a eso?

R: Lo del relato es verdad, y eso tiene que cambiar. No sé si es una cuestión de política de comunicación.  Los que no saben de esto, volviendo a lo de la Undécima, dicen: "Pero el Atleti jugó mejor, ¿no?". Lo cual no es verdad, y eso prueba que la guerra del relato la hemos perdido. Yo después de la final de Milán leí a madridistas (a madridistas, repito) decir que no merecimos ganar. Es insólito. Lo que decíamos antes: avergonzados. Comprendo, eso sí, que da apuro ganar al Atleti porque pobres. Ser del Atleti tiene que ser muy jodido. Yo mismo no soy antiatlético. De hecho, me cae bien Simeone.

P: Ah, ¿sí? Y aquello de que la Liga estaba "peligrosamente preparada" para el Madrid qué le pareció?

R: El mejor escribano echa un borrón. Es verdad también que lo de echar otro balón al campo pudo no ser cosa del recogepelotas precisamente, pero hay que reconocerle sus méritos. Cada verano le cambian el equipo y lo sigue teniendo ahí arriba. Ha hecho no uno, sino tres Atletis del más alto nivel. Es un tipo con cabeza y un hombre meritorio.

P: ¿Qué le parece Bale?

R: Ha mejorado mucho mi valoración. Me pareció carísimo en su momento, y consideré que tenía más que ver con la política de fichajes que con los fichajes, si entiendes lo que quiero decir. Pero reconozco que este año me ha encantado. Es verdad que se lesiona mucho, pero me he reconciliado mucho con él.

Entrevista: Francis García Cedeño (DiosaMaracana), Jesús Bengoechea

Fotos: Pablo Estellés