Hace ya algunos años, en una entrevista en El País, el bueno de Leo Beenhakker dejó algunas perlas que conviene rescatar en estos tiempos de zozobra. Una de ellas es especialmente significativa y nos habla de la importancia de los líderes y el espíritu ganador en los grupos. Relataba el neerlandés que, en una ocasión en la que el Madrid vivió toda una odisea para disputar un partido en el norte —con dos desvíos de avión, un regreso a Madrid y viaje en tren con camas incluido—, Camacho le pidió permiso para tomar la palabra en la charla previa al partido. Y lo hizo para dirigirse al por entonces emergente líder una generación que iba a marcar historia, Emilio Butragueño: “¡Oye, tú! ¡Nene! ¿Estás cansado? ¿Y qué? ¿Qué pasa? ¿Que el equipo tiene que pagar la cuenta porque tú estás un poquito cansado? ¡A tomar por culo! ¡Estamos rotos, pero pase lo que pase, aquí no vamos a perder! ¡De ninguna manera!”. Y no perdieron. El partido fue horroroso, pero los madridistas ganaron por la mínima: 0-1.
“Se creó un ambiente triunfador porque había un auténtico equipo. Las emociones de todos iban unidas”, destaca Beenhakker en la conversación. En esta frase, que abandona las páginas de los libros de autoayuda para convertirse en capital cuando manejas un vestuario, está el quid. Si lo tienes todo, jugadores de nivel y un cuerpo técnico a la altura, pero no hay ambiente de victoria, no tienes nada; si te falta algo, calidad o un fútbol fluido, el impulso de la unión siempre te hará alcanzar cotas inimaginables previamente.
El primer técnico extranjero en lograr tres Ligas de manera consecutiva y último del Madrid en conseguir dos seguidas concluye para el mármol: “Tuvimos malos días, pero jamás perdimos un partido por motivos extradeportivos”.
Guardemos las antorchas y veamos lo que se puede salvar y lo que se ha de reconstruir, porque siempre será más sencillo edificar desde los cimientos que hacerlo sobre las cenizas
Ahora que arrecian los francotiradores con blancos favoritos, principalmente el entrenador más laureado de la historia de la casa blanca, sería buen momento para reposar la ira, obviar a los que tenían las soluciones antes de que aparecieran los problemas y realizar un análisis completo y profundo de las carencias del equipo. Porque, no nos engañemos, con todas las deficiencias más que evidentes, instantes antes del inicio del partido contra el Arsenal en el Bernabéu se podían contar con los dedos de una mano aquellos que no creían en la remontada.
Así que guardemos las antorchas y veamos lo que se puede salvar y lo que se ha de reconstruir, porque siempre será más sencillo edificar desde los cimientos que hacerlo sobre las cenizas.
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Estoy de acuerdo en todo menos en lo de “obviar a todos aquellos que tenían las soluciones antes de que aparecieran los problemas…” Precisamente es a esos a los que hay que escuchar. Hay mucha gente en el club, ganando mucho dinero, cuyo trabajo es ese: anticiparse a los problemas.
Estamos olvidando todos los puntos que nos han robado y todos los que le han regalado al Barcelona. Seríamos ya campeones de liga , todo sería maravilloso , no habría debates como éste ni nada que criticar. Todo lo que estamos viviendo es fruto de la injusticia planificada y va a dar igual la plantilla que tengamos o el entrenador que la dirija. El Real Madrid le ha declarado la guerra al sistema corrupto ...etc y éste reacciona atacando con todo lo que tiene : dinero en abundancia para dar presencia audiovisual a su relato contra el Real Madrid , equipos dispuestos a alimentar ese relato y no entrar en disputa con Barcelona o Atlético de Madrid y una plantilla arbitral dispuesta a hacer lo que le digan para no perder esos sueldos descomunales.
Contra todo esto , y lo están haciendo a la perfección , da igual el equipo y el entrenador que tengas. Patadas , agresiones de roja que ni siquiera son arbitradas como falta y el largo etc que vemos en todos nuestros partidos , penaltis , fueras de juego....el arbitraje es un arma contra la que no puedes pelear si no cortas la mano que la empuña. A ver que hacemos ahora en medio de toda esta corrupción criminal.