All I want for Christmas: Thibú
A las nueve de la noche comenzó en el Bernabéu el último partido del año 2025. Se esperaba que fuese también el último encuentro en el que Xabi Alonso estuviera discutido, porque ello significaría que el equipo comenzaba a carburar, pero no parece que vaya a ser así, a pesar de la victoria.
El once despertó mucha ilusión entre los madridistas, sobre todo por la presencia de Fran García, por la izquierda, y Asencio, por la derecha (la cantera debe de estar cerrada, como muchas minas de carbón). En el eje de la defensa, Rüdiger y Huijsen. En el medio, ese centro del campo que funciona como un reloj, compuesto por Tchouaméni, Güler y Bellingham. Y delante, el renacido Rodrygo, el aún por renacer Vinícius y la bestia Mbappé.
El partido comenzó con susto: una pérdida de Tchouaméni propició una ocasión sevillista que desbarató Güler apareciendo de la nada. Segundos después, Huijsen perdió un balón absurdo que acabó en córner. Fantástico inicio. No veíamos empezar un partido tan mal al Madrid desde la última vez que comenzó igual.
Respondimos con una ocasión de Fran García, pero Vlachodimos la desbarató. Nosotros no Vlachodimos, sino que la jodimos directamente y el Sevilla pudo marcar en dos ocasiones consecutivas. El Madrid era un esperpento defensivo. Y no defensivo.
Después, Mendy agarró a Vinícius, pero el del pito dijo que no era amarilla. Carlos Martínez, desde el VAR, explicó que se libró de la amonestación porque el brasileño iba hacia afuera, aunque la verdad es que el siete no tenía intención de irse del campo aún. Si bien es cierto que aunque se hubiera ido tampoco se habría notado mucho.
El partido del Madrid estaba siendo obsceno como hacerse una infusión con los calcetines de un jurista eminente. Incluso en esta situación, una conexión Güler-Mbappé por poco concluye con la pelota dentro de la meta rival, pero Vlachodimos otra vez. Minutos después, el francés desgarró el flanco derecho sevillista con recortes que ni los de la crisis de 2008 —que aún arrastramos (la crisis, sobre todo)—, pero la jugada terminó en nada.
Poco después, Rodrygo repitió entrada por el mismo lado tras un córner inexistente. ¿Comenzaría el Madrid a dar una imagen más aseada? Lo siguiente fue un cabezazo de Dean a las nubes cuando gozaba de una buena posición, pero los de Xabi comenzaban a no estar tan mal. Al menos durante un rato.
Fran García y Vini combinaron bien y el capitán pidió apoyo al público, aunque quizá parte de los asistentes al Bernabéu estuvieran aprovechando el sopor para hacer algunas compras navideñas online.
Marcao decidió arrollar a Rodrygo con los tacos por delante. Roja de manual, pero Iglesias Villanueva, que escucha a Carlitos Martínez en la sala VOR, siguió el criterio de esta pieza fundamental del sistema, quien adujo que como la plancha no fue muy alta no tenía que ser roja. Como castigo divino, la falta acabó en gol de Bellingham, de cabeza a centro magistral de Rodrygo. Una pena, Carlitos, CTA & Company, ¿verdad?
Cuando aún estábamos recobrándonos de la sorpresa de que el Madrid marcara a balón parado, Marcao rozó a Rodrygo en el área y el once se desplomó como alcanzado por el manotazo de un gigante en lugar de aprovechar la situación. Se ganó la amarilla. Poco después, Rodrygo pisó sin intención, de manera fortuita, a Marcao en el talón y el sevillista necesitó ser atendido durante unos minutos.
Al descanso se llegó con una chilena de Alexis que se marchó por encima del larguero de la portería de Courtois. Una primera parte tediosa, aunque el tedio fue a menos con el paso de los minutos. 1-0, sin margen para el error en la segunda parte. O eso parecía.
Durante el descanso, el técnico del Sevilla, Almeyda, fue expulsado. Ya había sido amonestado durante los primeros 45 minutos. Quizá intentó entrar con su coche sin etiqueta en el centro de la ciudad de su homófono alcalde capitalino y el rojiblanco que ha regalado millones de metros cuadrados de suelo público a su Atleti ordenara a Muñiz Ruiz que lo echara. La prima de Monchi no pudo sentarse en el banquillo en su lugar. Unos dicen que porque no tenía carnet de entrenadora, otros porque no cabía.
Courtois sOstuvo al Madrid y Mbappé empató el récord de Cristiano
El encuentro se reanudó con una ocasión franca para Kylian, pero golpeó regular y el balón no puso en aprietos al guardameta rival. Todo lo contrario que Alexis, que no marcó el empate porque Thibaut es el mejor. Segundos después, dos ocasiones nítidas para Mbappé: en la primera disparó bien y raso pero fuera, y en la segunda disparó, cuando estaba solo, con la fuerza del abrazo de un Teletubbie harto de diazepam. La respuesta del Sevilla, un trallazo de Isaac que obligó a lucirse de nuevo a Courtois. Instantes después, lo mismo.
El Madrid había decidido, quizá invadido por el espíritu navideño, que el Sevilla también tenía que gozar de oportunidades para marcar gol y le sirvió en bandeja tres seguidas. Mientras tanto, Mbappé desaprovechó cinco, incluida una pelota que rebotó en la escuadra. A la afición, por lo que sea, no le gustó y hubo pitos. Como siguiéramos así, Vlaímos a choder del todo, porque los milagros de Thibaut no iban a ser eternos.
Los errores en ataque del Madrid seguían sucediéndose y los milagros de Courtois obrándose, hasta que Marcao arrolló a Bellingham, vio la segunda amarilla y se marchó a los vestuarios. Quizá contra diez los de Xabi sufrieran menos. Pero la solidaridad del Madrid con los necesitados es grande.
El encuentro era bello como un aquelarre de sapos sarnosos mudando la piel en el baño de Trainspotting. Se comenta que algunos hinchas blancos dejaron de ver el partido y decidieron pleitear con Hacienda porque les pareció más entretenido. Otros sintonizaron un telediario. Los más extremistas se afiliaron a un partido político.
En el 77', un Goes a lo Globetrotter chutó un balón que terminó en el larguero tras rozar Vlachodimos. Sin embargo, el Sevilla no parecía estar en inferioridad numérica. El Madrid, en cambio, sí daba sensación de inferioridad. De inferioridad en general. Más pitos del respetable.
Poco después del 82, Xabi sustituyó a Vini por Gonzalo. Antes había puesto en el campo a Camavinga por Arda. Endrick observaba desde la grada. A continuación, penalti claro de Juanlu sobre Rodrygo. Mbappé marcó, empató con Cristiano en uno de esos récords que no sirven para nada y lo celebró con un ¡Siuuuu!
El Sevilla siguió embotellando al Madrid con uno menos. Con uno menos el Sevilla, no el Madrid.
Muñiz Ruiz señaló un penalti inexistente sobre Bellingham, el defensor había tocado balón. Lo avisaron desde la sala VOR y rectificó. Llama la atención que el VAR solo funcione para corregir fallos que benefician al Madrid.
Instantes después, tarascada a Rodrygo que el colegiado interpreta que es fuera del área, pero bien podría haber sido dentro. Desde el VAR le dicen que es fuera. Lo dicho antes. Mbappé marró la ocasión lanzando el balón a las nubes.
Se acabó con Thibaut salvando otro gol cantado. Es un fuera de serie.
El partido fue una Odysseas, pero finalmente no Vlachodimos y pudimos sumar tres puntos importantes. Para Xabi. O no. Quién sabe.
El Madrid se va de vacaciones navideñas tarareando All I want for Christmas: Thibú.
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Insoportable. Al menos, me he reído mucho con esta crónica. Se agradece al autor sacar ganas para escribir después de tragarse esta basura.
Me alegro. Gracias.
Lo comparto
El habitual partido infame del Madrid en este 2025 que se acaba. Pero para acabado, Rudiger. Su partido, así como el de su pareja de baile, Huijsen, ha sido un despropósito constante. El de los laterales y Tchouameni, se ha acercado mucho al nivel de aquellos. Y lo de Vinicius da para una película de terror. Curiosamente, Rodrygo, del que no esperábamos ya nada, ha sido la mejor noticia de la noche. Se le ha visto ágil y con chispa. Un oasis, junto con Courtois, en ese desierto de juego que es este equipo, que es capaz de seguir tocando fondo, cuando parecía imposible. Xabi es desde hace tiempo un bulto sospechoso, pero su relevo creo que no resolvería nada. Con esos defensas y sin medio campo es imposible ganar algo.
Vaya banda ...
Ni éso; las bandas suelen estar más o menos organizadas…
¿Pero qué situación es ésta? ¿Cómo se puede describir lo de esta noche jugando contra los diez del Cerdilla? ¿Qué sigue pasando en el equipo y en su cuerpo técnico para que se sigan repitiendo estos bochornos, ridículos, calvarios o como queramos llamarlos? ¡Contra el Cerdilla y contra diez!! ¿Este "espectáculo" (y el de Talavera, Madrid, Vitoria, Gerona, Elche...) qué es: un bufonada, una farsa, un sainete, una tragedia, qué? ¿Cómo se ha llegado a este abismo de "juego", inseguridad, apatía, mieditis, inoperancia, blandenguería, nulidad, etc, etc, etc...? ¿Los jugadores ya no saben jugar, el entrenador no sabe entrenar? Yo solo pregunto porque, la verdad, esto no muestra atisbos de solución o de mejora o de enmendarse. Y la solución típica y tópica, la que todos los medios están buscando y alentando, no resuelve nada. Así que estamos apañados y habrá que buscar otra. ¿Sabéis alguna, amigos madridistas?
Valle-Inclán lo describió muy bien: un esperpento.
Vini vete ya. Este tipo es tóxico, y un vago.
El juego horrible, una pesadilla. El pobre entrenador, sin ideas y ya rendido. Nadie toma decisiones que corrijan está deriva y el club pierde prestigio cada día
Tantos años que lleva en el Madrid y todavía algunos no os habéis enterado de que se pronuncia TIBÓ
Tantos años leyendo y algunos no os habéis enterado de que es una licencia porque si no no rima con la canción.
Gracias Paco por esta crónica. Al menos he podido reírme en un dia horrible que se completó con un horrendo partido. Al menos hemos ganado y ne río con tu crónica!
Muchas gracias, joven.
Lo único que no llego a entender es, si al
final Alonso va a caer, porqué no cae con cuatro canteranos en el once, hasta que presuntos titulares dejen de rascarse los huevos. Ahora mismo, para mí, los únicos intransferibles son Courtois y Mbappé
Tchouameni, también.
Ya acabó el ultimátum o todavía sigue vigente? Somos un caos porque ni siquiera podemos llamarnos equipo. Ya tardan en comunicar la destitución.
Yo he visto partidos mucho peores esta temporada. El equipo quiso presionar, pero se activa tarde y los rivales salen fácil. Lo cogen desordenado la mayoría de las veces. Luego juegas sin uno de los laterales, con un central que está hecho un flan y sin nadie que domine en el medio. Aún así, Alonso ya parece convencido del 442. Le falta encajar las piezas en ese sistema. Para mí, Camavinga o Valverde junto a Tchouameni. A partir de ahí, se puede crecer si hay orden e intensidad.
Mejor Camavinga. Esperemos que pare su plaga de lesiones, al menos la última fue por patada.
Y para completar el esperpento, el público pitando durante el partido a sus propios jugadores.
Hay mayor despropósito?
Piten, piten, que así todo va mejor, se van los nervios, se aseguran los pases, se gana confianza.
Piten a sus propios jugadores, piten. Al árbitro no, a los que reciben aumentos de sueldo y de categoría por pitar a favor del farsa no se les pita, a los jugadores si, piten, piten. Contribuyan al caos.
El público ha sido paciente. Estamos en diciembre y el Madrid no jugó un partido potable en todo el año, incluyo parte de 2024 también. Los abonos cuestan dinero y el espectáculo es mediocre. Los jugadores ganan muchísimo dinero y hay actitudes que no se pueden consentir. En el Bernabéu la calidad no se aplaude, se da por descontada, lo que se premia es el esfuerzo.
Desconozco si en La Galerna se ha publicado ya algún artículo o artículos monográficos sobre Carlos Martínez. Si es así podrían darme la referencia? Si no es así, por favor, háganlo o háganlos. Por cierto, alguien recuerda un comentario del susodicho en un Real Madrid-Betis de hace muchos años ( pre pandemia) en el que afirmaba, tras una decisión que, según él, favorecía al Real Madrid, que la liga quedaba adulterada? Gracias. Ah! Y espero dejen trabajar tranquilo a Xabi Alonso.
En el Nou Camp cantan "Xabi quédate* no te digo mas
Quedan retratados todos los grandes conocedores del furgol que clamaban por echar a Ancelotti y fichar a Alonso. Muchos son los que ahora critican a Alonso, y muchos son los que comentan aquí una cosa y la contraria.
Oportunistas, ventajistas del momento, siempre con la verdad de su lado, y si no la cambian.
Echar a Alonso para fichar a quién? A ver estos sabios del piperío, estos académicos de la doctrina furgolistica, estos científicos del buen juego, a ver ahora que proponen...
Es cierto que el equipo no domina el medio y la defensa está en cuadro.
A las salidas de Modric y Kroos sin reemplazo de su categoría , (excepto Bellingham pero con otro perfil) se han unido los problemas físicos constantes de Militao Alaba, Rudiger y Carvajal, que tampoco tienen por el momento recambio similar en Huidjsen, Asencio y Carreras.
En la delantera, Vinicius sigue irregular y se ha recuperado Rodrygo en los últimos partidos. Gonzalo aún no hace de Joselu, y Mbappé es una pieza valiosa pero difícil de encajar por su forma de jugar.Parece que si esta acoplado desacopla al resto y al revés. Sólo un dato, el equipo marca menos goles y necesita más tiros a puerta para meter gol.
Aún así, el términos de clasificación el equipo está más o menos bien situado tanto en Liga como en Champions, y si como debe va a mejor todo es posible.
A ver cuándo volvemos a ser un club deportivo y no un circo. El Madrid glorioso se perfiló con Mourinho y maduró con Carletto y ZZ. Una de las claves de esa etapa inigualable fueron, los fichajes. Al fútbol juegan bien, los buenos jugadores. CR7, que sigue marcando goles, Benzema, Bale. Di María, Casemiro, Modric, Kroos, Sergio Ramos, Marcelo, y no sigo. Miren la alineación de ayer y saquen sus propias conclusiones.
Por ejemplo, ayer, Güler, recuperó atrás tantos balones como Tchouaméní e infinitamente más que Bellingham (que no recuperó ninguno). De hecho, en los primeros minutos, salvó un gol claro tras una pérdida absurda de Aurèlien. No sé dónde ves que no defiende. Por supuesto, no tiene el cuerpo de Gvardiol pero sí la inteligencia suficiente para colocarse en la posición más adecuada. Y, ayer, no perdió un sólo balón. Aunque, lo más claro de todo fue ver lo que le pasó al equipo con su ausencia: se desencuadernó aún más de lo que estaba.
Hoy día es imposible jugar bien con dos laterales inanes (Asencio y Fran García) que no dominan sus bandas por las que debe fluir el juego de ataque. Por supuesto, las bajas condicionan esta situación pero, se pueden hacer otras cosas, como por ejemplo, jugar con tres centrales y cinco centrocampistas que impidan la división del equipo en dos partes, dejando tremendos agujeros en el centro por donde se mueve el adversario como pez en el agua. Por eso y no por el gran partido de Güler que fue el único que repartió juego con orden y objetivos claros, sin ninguna ayuda del gran británico -salvo el gol, poco más hizo- nos entraron por todos lados. Tuvo que retrasar mucho su posición Tchouamèni por la ausencia total de Huijsen y se notó demasiado su hueco en el centro del campo. Las constantes idas de olla del malagueño y la transparencia de Asencio, hicieron que Rüdiger tuviera que desplazarse mucho trecho de su posición, dejando vías de agua que tuvo que solventar Courtois. Insisto, no podemos jugar sin bandas.
Por cierto, ayer, la izquierda en ataque estuvo todo el tiempo en botas de Fran por la dimisión de Vini. Así nos fue por aquel lado. Gracias a que Rodrygo parece que se ha cambiado las pilas que ya tenía sulfatadas…