La final que presenciamos el sábado en la Cartuja fue un duelo de igual a igual. De poder a poder. Dos equipos explotando al máximo todos sus recursos disponibles. Un partido que se decidió finalmente por detalles y errores individuales. Un monumento al fútbol.
El Barça comenzó dominando el partido, con un Real Madrid muy aculado y que sufrió durante los primeros minutos por el juego interior de los azulgranas, con un Ferrán Torres muy inspirado.
A partir del primer cuarto de hora, Ancelotti introdujo un par de ajustes y el Real Madrid cerró sus líneas refugiándose en un Tchouameni inmenso.
El partido del jugador francés es la confirmación de su redención. Su actuación fue una exhibición defensiva, con un 70% de duelos ganados. Desde que tocó fondo en noviembre, recibiendo un toque de atención del Bernabéu, se ha resarcido hasta mostrar su mejor versión desde que llegó al club blanco en 2022.
Sin embargo, cuando mejor estaba el Madrid y daba la sensación de haber estabilizado el partido, un error de atención de Bellingham, dejando la frontal del área libre, terminó con un golazo de Pedri, donde el jugador canario ajustó a la escuadra derecha un disparo inalcanzable para Courtois.
Arda asumió, como ya hiciera en Getafe, el rol de centrocampista organizador, pero esta vez en un contexto mucho más hostil y complicado: una final ante el eterno rival en la que se debía remontar. Cualquiera podría pensar que un jugador con tan poco protagonismo a lo largo de esta temporada se amilanaría y jugaría a no equivocarse. Nada más lejos de la realidad
Pero la segunda parte fue otra historia. La entrada de Mbappé y Arda Güler, la salida de un Rodrygo inexistente, y la presión de los madridistas cortocircuitaron la posesión de un Barcelona que se vio completamente superado. Prueba de ello fue que Flick, viendo cómo había girado el partido, quitó a sus tres centrocampistas uno por uno.
El Madrid consiguió remontar con un gran gol de falta de Mbappé, y un cabezazo de Tchouameni a la salida de un córner botado por Güler.
Y me quiero detener en el centrocampista turco. Su entrada cambió por completo la forma en la que el Madrid atacó. Arda asumió, como ya hiciera en Getafe, el rol de centrocampista organizador, pero esta vez en un contexto mucho más hostil y complicado: una final ante el eterno rival en la que se debía remontar. Cualquiera podría pensar que un jugador con tan poco protagonismo a lo largo de esta temporada se amilanaría y jugaría a no equivocarse. Nada más lejos de la realidad. Arda pidió el balón, organizó la salida de balón, y ordenó al equipo. Quizá si Ancelotti le hubiera dado más minutos esta temporada, asumiendo este papel, podríamos haber visto un equipo mucho más organizado y alegre.
A pesar de haberse puesto por delante, el Madrid no hizo una buena lectura a partir del 1-2, puesto que debió dormir el encuentro y encontrar espacios al contragolpe. Fruto de esta mala lectura, Lamine Yamal filtró un gran pase a Ferrán Torres, quien regateó a un Courtois que estuvo bastante desacertado en esta ocasión, porque se quedó a media salida en una situación en la que Rüdiger había conseguido alcanzar al delantero español.
Respecto a la prórroga, no hay muchos aspectos a analizar, como en la mayoría. Se juegan por jugar. El 3-2 definitivo llegó en un error imperdonable de Brahim alejándose de un balón que debió haber atacado para tocar de nuevo con Modric, o para forzar una falta.
En clave madridista, la final dejó varias lecturas.
Este equipo podía haber dado mucho más de sí durante esta temporada. Jugadores como Arda Güler o Endrick deberían haber jugado muchos más minutos porque poseían y poseen una serie de características que hubieran ayudado bastante a un equipo carente de la figura de un organizador y de un delantero centro clásico.
Jude Bellingham está firmando una temporada bastante gris comparada al nivel al que sabemos que puede rendir. Y ese nivel se vio reflejado en la exhibición que dio en la segunda parte. El británico fue el mejor jugador del campo. Regaló un gol a Vinicius, partió al Barcelona en conducción, ganó el 81% de duelos terrestres y fue el primer defensa en la presión que tantos problemas le causó al equipo de Flick.
Esta exhibición de Jude contrasta con un partido muy decepcionante de Vinicius. En sintonía con su temporada. Realmente sus números son buenos (20 goles y 14 asistencias), pero si profundizamos en su desempeño en partidos clave, que solían ser la especialidad del brasileño, nos encontramos un rendimiento muy por debajo de lo que se espera de un jugador de su categoría. Desconozco si las recientes informaciones acerca de su renovación están afectando a su rendimiento, o si hay otros factores que no conozcamos influyéndole, pero debe resetear y reencontrarse con su mejor versión, porque el Real Madrid le va a necesitar, tanto a corto como a largo plazo.
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Estuve en la Cartuja. No entiendo que jugara Mendy después de 6/7 semanas fuera lesionado. A mí modo ver, Rodrygo y Brahim quedan muy señalados. De Lucas Vázquez no hay nada que decir. Nunca ha sido ni será lateral derecho. No me cuadra que en la ciudad deportiva no haya un solo lateral derecho mejor que Lucas. Ancelotti no ha querido mirar hacia la cantera ni darle bola a los jóvenes mencionados en este artículo, así nos ha ido. Ahora nos quedamos sin Rudiger y Mendy para lo que resta de liga. Está complicado el tema.
El el fútbol no se puede aspirar a nada sin defensa y sin entusiasmo.
Si, si, vete con el rayito este q nos mete palos con los pies, manos y boca cuando nos enfrentamos y calla como una lechuza cuando le roba la farsa.
Ya te puedes ir ya.
Juan este Gabriel es el impresentable que me suplanta.
Espero que le contestes como contestas en el párrafo final de tu comentario
Un saludo
La Galerna por llamar miserable al Gabriel que me suplante con esos inaceptables comentarios me dice que esa palabra está pendiente de moderación y al falso Gabriel le permite comentarios altamente rechazables
No lo comprendo
Conclusión: que ganó la final un equipo que ha estado pagando al vicepresidente de los árbitros durante 17 años... que se sepa. Dentro de un cierto tiempo conoceremos a quien estaban 'untando' en la actualidad
Conclusión, que hasta que Carletto no se ha cargado a Rudiger no ha parado
Conclusiones: Rüdiger acaba de decir que lleva jugando con dolores siete meses. Militao venía de lesión. Alaba casi dos años lesionado. La gestión en este apartado por parte de la directiva ha sido irresponsable.
Dos. Pensar que Lucas podría sustituir a Carvajal fue como cuando se creyó que Mariano podría hacer de Cristiano.
Tres. Kroos era la base de todo el juego. Al igual que Makelele sostenía a todos los galácticos. A veces un jugador si es más importante que todos juntos.
Cuatro. Ancelotti ha sido víctima de la planificación y también de su cobardía a la hora de apostar por los jovenes. Su obsesión porque jugarán los arriba ha terminado lastrando al equipo. Se merece todos mis respetos pero ha fracasado esta temporada.
Cinco. En un equipo como el Madrid, con la exigencia que tiene y el desgaste de partidos, la máxima: si perdemos hay que fichar y si ganamos hay que fichar aun más, me parece fundamental. Buena parte de que nos cueste enlazar ciclos ganadores en los últimos 40 años viene de ahí. Ha faltado el instinto de machacar a los rivales cuando mejor estábamos. Fichamos a Mbappe como cuando fichamos a Beckham y nos creímos que ya estaba todo hecho. La caída ha sido similar. Repetimos los mismos errores del pasado.
Durante muchos años se criticó fichar a tontas y a locas y tirar el dinero, después se alabó ahorrar y fichar con sentido gente joven en caladeros sudamericanos. Ahora parece que se pide todo lo contrario. La cantera era cosa de clubes pequeños o del farsa porque no tenía otra cosa, ahora se pide que nos salve la vida. No nos ponemos de acuerdo: habrá que hacer un poco de todo pero nada en exceso.
De acuerdo. Es un poco de todo. Si no tienes dinero, potencia la cantera. El problema es que la cantera está bastante abandonada porque se dejó de invertir. En el primer equipo ha pasado lo mismo. Las inversiones han sido a coste cero prácticamente. Tchouameni y Jude, vinieron tras salidas y ventas importantes. Florentino siempre ha pensado que juntando a buenos jugadores es suficiente, pero eso era así en 1950. Hoy en día si no corres y presionas no le ganas a nadie. De nada va a servir fichar a Xabi Alonso o al que sea si luego no compensas la plantilla.
Para mi la clave de la segunda parte es la presion de Bellingham sobre Pedri, por el cual le mete la pierna no se cuentas veces, cortocircuita la posesion cule y lanza al Madrid. Un Vini del año pasado habria machacado al Barca con los balones que le ponia Jude.
Ya lo dijo otro en los comentarios, sin entusiasmo no hay futbol. La apuesta de Ancelotti por hacer cuajar a los Cuatro Fantasticos ha fracasado y por ello hundido al equipo; los titulares, deprimidos, y los del banquillo fuera de todo. No es normal que un jugador como Brahim juegue menos de 5 minutos en partidos gordos, ni que Endrick y Arda solo se vean cuando este todo perdido.
Y ahora hay que saber manejar lo que queda, que sin duda pasara´ por la entrada de uno o dos canteranos antes las lesiones del sabado. No se si Ancelotti es siquiera capaz de hacerlo.
Mendy baja para el mundial. Otro más.
Ánimo DON FLORENTINO, los records están para batirse.