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James y la tristeza

James y la tristeza

Escrito por: Rafa Moreno16 marzo, 2016
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James está triste, qué tendrá James. El jugador colombiano parece estar pasando una segunda pretemporada en el Real Madrid. Dos en un mismo año. Tal vez la primera –la oficial, esa que por lo visto ahora, con eso de las giras, se ve algo mermada- no resultó del todo satisfactoria desde el punto de vista de la adecuada preparación de este largo y tempestuoso camino que ojalá conduzca a Milán contra todo pronóstico (¿no es el Madrid, entre otras cosas, para bien y para mal, ir contra pronóstico?). Tal vez la lesión que tuvo hace no demasiado tiempo aún le esté pasando cierta factura a James. Pero tal vez también debamos tener en cuenta un cierto componente emocional en el evidente deambular del colombiano por los partidos, salvados en ocasiones -es justo reconocerlo- por algún gol de relumbrón o dos asistencias milimetradas hasta el deleite. Con todo, son apenas pinceladas para un jugador llamado a ser artista con mayúsculas, pero también son trazos que hacen pensar que el genio aletargado en la lámpara tan solo espera un adecuado frote para salir y concedernos más de tres deseos.

No es jugador de focos Jamesito. Suele empequeñecerse ante la masa de medios que, ávidos de todo lo que no sea mesura, arriman sus alcachofas y grabadoras al mentón de los jugadores. Hay quien, por galones y carácter, logra provocar que los muchachos de la prensa den un imperceptible paso atrás cuando habla. Por el contrario, hay jugadores que nada dicen cuando son asaltados, ni falta que hace; jugadores que con la voz neutra de un robot ilustran al personal con la máxima de que “no hay rival pequeño”, la nadería de que “estamos con el entrenador” y la tautología de que “aún queda liga”. Y luego hay gente como James, jóvenes retraídos que, incluso teniendo motivos para alzar la voz en denuncia o auxilio, denotan cierta fragilidad y sorpresa ante tanta jauría. Su leve tartamudez al hablar ayuda a provocar estas sensaciones, pero no es solo eso. Son los ojos, sobre todo los ojos, levemente desangelados, como quien busca clemencia sin entender a qué viene tanta inquisición, como quien se sabe cordero sin que por supuesto se nos conceda el sanador silencio.

James tristeza

Yo entiendo perfectamente a James, y quisiera estar allí para apartar su cáliz de vinagre. Si el fútbol es de los jugadores y de la afición (inviertan ustedes el orden si quieren), a qué esta hipertrofia de los medios, que ya no son medios, sino el mensaje mismo; un mensaje escuálido, tan apremiante e inane que viene deshilachado de fábrica, perfecto producto de usar y tirar (sobre todo de tirar) apenas cogido por dos alfileres que se clavan como puñales en las entendederas de toda persona sensata. Yo veo a James acorralado entre esos alfileres, más bien ya punzones a sus ojos, incapaz de entender por qué demonios esto no va de fútbol y solo de fútbol, por qué una mueca captada a años luz de distancia, pongamos en el momento de una sustitución, es manoseada hasta que signifique lo peor (y más inverosímil y ridículo) que pueda significar, por qué una especulación alcanza bien pronto la categoría de verdad cartesiana, por qué vende más el rosario de la Aurora que la belleza de un golpeo de pelota, por qué en definitiva no se cuida lo que supuestamente se ama.

Sé que James no está jugando bien, pero sé mejor que las cualidades demostradas hacen ver este bache como una anomalía si es que logra gritar para sus adentros un gran sí que desafíe a tanta tormenta perfecta de atrezo. Lo sorprendente, lo que puede desarmar hasta al más entusiasta, es que parezca asumido que una mala situación es la ocasión propicia para convertirla en peor por obra y (des)gracia del ensordecedor runrún que envuelve al Real Madrid día y noche hasta el Juicio Final del día y la noche siguientes. Sin embargo, bien parece que el enemigo no está ya a las puertas y que La invasión de los ladrones de cuerpos es un documental sobre ese madridismo que todo lo quemaría ahora -y también antes, y ya puestos sigamos mañana- para empezar siempre de nuevo, actualizando así más el camusiano mito de Sísifo que el del Ave Fénix. Allá cada cual con sus desmesuras, pero lejos de mí quien piense (?) que la mera crítica se basta para dar señales de inteligencia. Yo, mientras sea posible, prefiero sentarme en las ruinas a esperar lo mejor de James y del Madrid, no crean que por cursilería o ingenuidad, sino justamente como acto de denuncia, de cierta infancia no olvidada y tal vez de coraje. En definitiva, yo solo venía a no pedir perdón por creer que el Madrid es exactamente saber que siempre es posible, no como la vida.

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Tras la Séptima, estudié Filosofía y Periodismo. Intenté una vez el aguanís, envidio el karma de Karembeu, vi a Zidane parar el tiempo y a Ronaldo acelerarlo, tomaba apuntes cuando jugaba Redondo, escribo para inclinar el campo. He visto cosas que vosotros no creeríais de no ser madridistas.

7 comentarios en: James y la tristeza

  1. Buenas noches, yo no se si James esta triste o no, sólo que estaba contentísimo con su fichaje porque ya
    lo he comentado alguna que otra vez, James tiene dos virtudes que para mi son indispensables en el deporte
    profesional del máximo nivel 1) Una ambición sin límites por ser el mejor y triunfar y 2) Una inteligencia
    que le hace saber en todo momento que es lo que puede hacer o no en el campo y una finura, por la cual
    escoge siempre la mejor opción. A la vista de los resultados de este año, ¿nos habremos equivocado
    tanto los madridistas con el colombiano?.
    Saludos blancos, castellanos y comuneros

  2. Yo no cuestiono a James. Con Ancelotti hizo un gran fútbol. Este año ha tenido ciertos vaivenes, pero él sigue ahí, intentándolo, con ganas. Ya que se suele hablar de la dupla James-Isco, si me dieran a elegir, me quedo con James, sin lugar a dudas.
    Además, en los medios (que suelen ser antimadridistas) están tirando mucho a dar contra James (algo también a Isco, pero menos).

    Me gustaría que en la Galerna comentaran algo sobre Sergio Ramos. Será el capitán, pero realmente últimamente no está jugando muy bien... le salen ramalazos buenos a veces, pero la mayoría está más bien del lado del despiste y de no pensar bien las cosas (faltas absurdas que llevan a tarjetas o penaltis).
    Sé que Ramos tiene mucha prensa anti de su lado (como pasaba con Casillas) porque tiene representante ahí metido y "amigos" periodistas (de esos que le ríen las gracias pero que están deseando que fracase el Madrid, ya saben)...
    Un toque de atención a Ramos, al menos, que abra los ojos y no se deje llevar por ese manido "mejor defensa del mundo" que tanto le cacarean... Sabemos que tiene contrato hasta el 2020, pero espero que si hay que sentarlo en el banquillo, no arme la historia de terror que sucedió con Casillas.

    1. Lo he dicho varias veces, el día que Sergio Ramos se enfundó la camiseta de Ozil debajo de la suya en no se que partido en el Bernabéu, estando Mou de técnico, ese mismo día, lo tuvieron que largar del Madrid, hace años que no está al nivel exigido, vive del gol de Lisboa, se fue el topo pero aún queda éste, es este equipo ahí que hacer una limpia bastante grande, James para mí fue de los mejores el año pasado, por supuesto, pero éste año está siendo letal, él y Isco, son los primeros que echaba, seguiría con Ramos, Pepe, Marcelo (este o juega de interior o no juega, defensivamente el malísimo) Kroos, otro que el año pasado jugó fenomenal y éste parece su hermano, y arriba echo a los tres, uno por que ya está en la cuesta abajo, el otro por que siempre está lesionado, y Benzema porque lleva 7 años en el Madrid y sólo lo henos visto uno o dos, que razón tenía Mou cuando decía, si no tengo perro, cazo con gato. y reconozco que este año está bien.

  3. Le dijeron que sería balón de oro y se lo creyó, antes de hacer méritos para ello. Ahora ya no lo será. En la élite uno no puede bajar el pistón o es devorado sin piedad.

  4. 30 de diciembre de 2015, estadio Santiago Bernabeu, Real Madrid-Real Sociedad.

    Tras ser eliminado por una sanción en Copa, el Madrid se juega no perder el tren de la liga antes de mitad de temporada.
    El Madrid se adelanta en el marcador en el primer tiempo, al comenzar el segundo tiempo, empata la Real Sociedad y en los siguientes minutos tiene alguna oportunidad para adelantarse en el marcador.

    Minuto 58 de partido, cambio, sale James entra Kovacic...

    James sale del campo andando lentamente y aplaudiendo a la grada mostrando su desacuerdo con el cambio y con el entrenador del equipo, importándole un pimiento el REAL MADRID CF; cualquier jugador que hubiese sentido algo los colores habría salido corriendo del campo para no perder tiempo y ver si el equipo podía remontar.

    Medio minuto mas tarde sale del campo y entra Kovacic, el Madrid mejora el juego en el centro del campo y el partido finaliza 3-1

  5. En mi opinión James debe de tener la oportunidad de darle la vuelta a esta situación durante la próxima temporada. Hay que recordar que este año ha sido raruno para él. Jugó La Copa América y empezó más tarde la pretemporada. Justo cuando estaba más fino, sufrió una lesión de bastante duración, cortando su puesta apunto. Las cosas no pasan porque sí. Recordad la primera temporada de Modric, que llegó sin pretemporada. Esto es lo mismo.

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